10 de abril de 2011

Poseída

Tus manos recorren con firmeza mi cuerpo
En un dejar fluir el tiempo o en una rápida embestida.
Buscando cada rincón que no ha sido explorado
A veces tierna y otras furiosamente poseída.

Tus piernas me envuelven haciéndome más tuya
Sabiendo que acabaré entre tus brazos abatida
Tomando posesión de mis voluptuosas caderas
En una lucha desigual, en una batalla perdida.

Tu lengua recorre el camino entre mis pechos y mi vientre
Tu boca se dirige a mi sexo, ardiente, complacida
Tus gemidos me estremecen y tiemblo de placer
Ya puedo sentir tu llama, cálida, encendida.

Tu miembro se ensambla perfectamente en mi sexo
En suaves movimiento y en salvajes sacudidas
El ritmo se acelera, la pasión se desenfrena
Lléname toda de ti, yo todo te daré mi vida.

Tu cuerpo sudoroso galopando sobre el mío
Me penetras, me posees con rabia contenida
Nada puede detenernos, siento nuestros espasmos
Hemos llegado al éxtasis, de ti me siento invadida.

Nuestros cuerpos agotados se funden en un abrazo
Un solo ser, un solo espacio, nuestra guarida.
Haz que se detenga el tiempo, para el universo
Quiero sentirme así, eternamente correspondida.
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